Paseo de Abandoibarra en Bilbao

¿Podrías describirnos en una frase el paseo?

El eje de la ciudad.

¿En qué época del año recomiendas hacerlo? ¿Y en qué momento del día?

Uno de los encantos de Bilbao es que nunca te aseguras el tiempo, pueden caer chuzos de punta en verano y necesitar gafas de sol en pleno invierno. Dicho esto y como apasionada del buen tiempo yo prefiero hacerlo con sol, el agua de la Ría baja más clara, y si tienes suerte y ha llovido los días previos la pillarás alta, por no hablar del efecto de los rayos del sol sobre el Museo Guggenheim, ¡impresionante! Aunque reconoceré que su verdadera esencia es verlo encapotado de nubes. ¿El momento del día? Mi favorito después de comer, qué mejor para un día festivo que almorzar fuera y tomar un helado de postre mientras paseas por Abandoibarra.

¿Qué lugares de interés has visto en tu paseo?

Lo más destacable de este paseo es, sin duda, la diversidad de monumentos arquitectónicos, de todo tipo y época. Empezando en el teatro Arriaga, de estilo neobarroco, pasando por el Ayuntamiento, el moderno puente de Zubizuri (puente blanco) del arquitecto Santiago Calatrava, las torres Isozaki o la Universidad de Deusto y terminando en el Museo Guggenheim de Bilbao, enmarcado por el majestuoso puente de La Salve. 

¿Nos enseñas la mejor foto que hiciste?

¿Recomiendas algún sitio para comer o tomar algo en este recorrido?

El restaurante Atea, junto a la Ría de Bilbao (paseo de Uribitarte 4) es un clásico para los bilbaínos, el chef Daniel García ofrece platos de alta cocina pero a precios bastante competitivos. Aunque personalmente mi favorito de esta zona es el restaurante Larruzz (Uribitarte 24), un restaurante más familiar que tiene unos arroces de infarto a un precio muy asequible.  Y si eres capaz de decir que no al postre te invito a que continues el paseo hasta llegar al museo Guggenheim, justo en frente del enorme perro de flores Puppy, encontrarás una heladería italiana llamada Amorino. ¡Seguro que repites!

A quienes se queden unos días en Bilbao, ¿les recomendarías otro paseo indispensable por la ciudad?

¡Por supuesto! todavía queda Bilbao para rato. Imprescindible pasar por la Plaza Nueva a probar nuestros típicos pintxos, te reto a elegir uno en cada barra de bar. Perderte por la siete calles del Casco Viejo, literalmente, son siete y yo a día de hoy me sigo perdiendo. Y si eres fanático del futbol, coge la calle del Licenciado Poza y recórrela viendo de fondo el estadio de San Mamés. Los días de partido esta calle se tiñe de rojo y blanco, ¡una experiencia que tienes que vivir si vienes a Bilbao sin duda!

¿Y por los alrededores?

Si vienes a Bilbao no puedes dejar de ir a ver la costa vasca. Un sitio cercano a Bilbao y de mis favoritos es la zona de Barrika, donde verás el mar bordeado por impresionantes acantilados y playas salvajes. Si tienes la oportunidad, acércate al bar El Golfo Norte. En la parte de abajo del parking verás una playa increíble, probablemente llena de surfistas. Termina el día tomándote algo en la terraza del bar, mientras ves la puesta de sol y te relajas con música ambiente.